La Unión Europea tiene una meta para 2050: que las economías de sus Estados miembros sean más respetuosas con el clima y consuman energía de forma más eficiente.Esta transición energética sacará el carbón de la producción eléctrica o no será. Ni siquiera presidentes como el de Estados Unidos, con una posición manifiestamente contraria a la tendencia global en materia climática, podrán impedir un proceso que ya se ha aceptado a nivel internacional a través delAcuerdo de París pero que en los mercados tecnológicos y financieros se sabe ya como una realidad.
Y más aún, para países como España, esta transición se plantea como una oportunidad y casi una obligación para transformar el modelo económico y social del país.
Carmen Vaquerizo 4ºESO
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