Con
el nombramiento de Centeno en el Eurogrupo, el país quiere colocarse
al frente de la dirección de la UE
Portugal
quiere ser un país protagonista de la Unión Europea. Se ha puesto
al frente del aumento de la contribución de los países de la UE
—algo lógico por la salida del Reino Unido—, pero también
aporta iniciativas para reforzar la organización.
El
primer ministro portugués, António Costa, ha anunciado que su país
va a proponer a Bruselas la creación de tres impuestos comunitarios,
una tasa digital, una tasa verde y una tasa sobre las transacciones
financieras internacionales.
La
tasa digital iría dirigida a sacar algún ingreso de los grandes
chupópteros de Internet, firmas como Google y Facebook, que animan a
ponerles contenidos gratuitos en sus plataformas, que luego difunden
por infraestructuras que no son suyas pero que aprovechan
gratuitamente y que a final de año tienen los mayores ingresos del
mundo con escasa aportación impositiva en los países donde ya
ejercen casi monopolios publicitarios y apenas cotizan.
Otro
de los impuestos propuestos por Portugal se refiere a la ecología,
un gravamen a las empresas contaminantes destinada a mejorar el medio
ambiente y a promover políticas medioambientales.
El
tercer tributo sería a las transacciones financieras, una especie de
la tan hablada tasa Tobyn, que, además de proporcionar recursos a la
UE, también reduciría movimientos especulativos.
Manuel Venera -1ºBachillerato
No hay comentarios:
Publicar un comentario